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Antes de crear tu árbol genealógico, tienes que investigar y recopilar suficiente información . Si vas a hacer un árbol genealógico más grande, en el que incluyas a tus parientes lejanos, tendrás que investigar más a fondo y organizar los datos correctamente. Pero empecemos por el árbol genealógico de tus parientes más cercanos, ya que cuando te hagas una idea, te será más fácil hacer uno sobre tu familia más lejana.
1. Haz un esquema de todos los miembros que te gustaría incluir en el árbol genealógico. Si tienes una familia grande, puede que te resulte más fácil hacer árboles separados para cada lado de tu familia.
2. Haz un esquema en un papel. A partir de ese esquema, dibuja con lápiz un árbol con ramas para cada hermano.
3. En esas ramas, puedes hacer otra ramita o subrama por cada hijo que tenga esa familia. Una vez que dibujaste la base del árbol, traza sobre él con un marcador.
4. Luego de dibujar las ramas, píntalas y añade algunas hojas.
5. Coloca las fotos sobre el dibujo. Deja que los niños recorten las fotos para pegarlas al dibujo.
6. Por último, añade las fotos en la rama adecuada. A medida que vayas colocando las fotos puedes ir contando a tus hijos qué parentesco tienen con cada una de las personas del árbol.
7. Cuando el pegamento se haya secado, pon una etiqueta a cada miembro de la familia con un marcador de color.
Enseñar a los niños la historia familiar es muy importante, y ver fotos de los miembros de la familia y saber cómo se relacionan entre sí hace que las anécdotas sean más fáciles de comprender.
El pasado puede ser muy valioso para muchas personas si se toman el tiempo de explorarlo y se interesan por él. Por desgracia, muchos jóvenes se muestran muy distanciados de su propia historia. Empieza a trabajar con los niños cuando aún son pequeños utilizando un árbol genealógico, para que tengan una buena conexión con su pasado desde una temprana edad.
Es una actividad divertida para hacer con niños que están en la edad de ir a la escuela primaria. Además de que es muy posible que lo disfruten, enseñarles a esta edad significa que los detalles se les quedarán grabados durante más tiempo y con más profundidad. El adolescente o preadolescente promedio no suele interesarse tanto como un niño más pequeño. Si te cuesta hacer que se interesen, es muy probable que no guarden tanta información.
Lo que técnicamente se incluye en un árbol genealógico básico para niños son los parientes y antepasados cercanos. Lo normal es que empieces el árbol por ti, te remontes a tus padres, luego a tus abuelos, luego a tus bisabuelos y así sucesivamente. Los hermanos, tíos, tías, primos y demás no suelen incluirse en el formato básico del árbol. Se incluyen en los expedientes de investigación, se registran en las fichas de los grupos familiares o aparecen en los cuadros genealógicos.
1. Revisa el árbol genealógico.
Asegúrate de que las relaciones estén correctas. Si no estás seguro de algo, puedes preguntar a alguno de tus familiares para confirmarlo.
2. Deja que los niños hagan las entrevistas.
Hacer que tus hijos hagan la entrevista les será muy divertido y, además, es una gran actividad para desarrollar sus habilidades sociales.
3. No los hagas tan complicados.
Como se trata de una actividad familiar para los niños, asegúrate de que les será entenderla. Si puedes, limita la información hasta los abuelos.