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A diferencia de cualquier otro póster, el póster científico es más informativo y a veces formal, dependiendo del tipo de público al que se presente. Por lo general, este se hace para eventos grandes y se presenta con un método lógico o se publica para que todos lo puedan leer y ver. Los pósters pueden tener un toque de diseños llamativos para captar la atención del lector. Se utiliza como medio de comunicación mediante la visualización y explicación. Se puede utilizar una amplia variedad de temas a la hora de realizar uno, relacionados a la ciencia y a veces no, siempre y cuando sea claro y tenga ayudas visuales.
El formato básico de un póster científico debe realizarse de manera profesional. Se trata de que sea de gran tamaño para que se pueda ver de lejos, ya que también se utilizará para algunas presentaciones y se colocará en exposiciones en las que los visitantes podrían no estar cerca de algunos objetos. Puede imprimirse digitalmente o hacerse manualmente como si fuera un collage, pero de manera metódica. Consta de contenidos específicos como introducción, material y métodos, resultados y conclusión. También, es ideal que un póster científico contenga información adicional, reconocimientos debidos a la investigación y algunos recursos. Puede ser muy llamativo, pero los diseños no deben afectar la legibilidad del póster.
Realizar un póster científico puede ser realmente interesante y divertido, pero requiere mucho tiempo para que el creador se someta a un largo proceso de investigación para obtener detalles más precisos. El contenido debe dividirse por secciones. A continuación te explicamos paso a paso cómo hacer un póster científico:
Paso 1. Realiza un borrador de cómo quieres que luzca el póster. Dibuja la posible distribución de los contenidos y sus imágenes. De este modo, el creador podrá crear diferentes diseños del póster y así evitar errores errores.
Paso 2. Anota toda la información obtenida de forma consecutiva y sepárala por categorías. Esto permite que el creador pueda corregir los errores y leer nuevamente la presentación.
Paso 3. El siguiente paso es conseguir el tablero en el que se colocará el póster. Ten en cuenta el tamaño específico que se requiere para el evento o espacio. A continuación, procede a diseñar las secciones del póster. Empieza escribiendo el título del póster, este no debe ser largo. Crea un título atractivo que dé una pista general sobre el cartel que invite a los visitantes o espectadores.
Paso 4. Procede a redactar la introducción. Las introducciones no deben ser muy largas, deben tener menos de 200 palabras, pues de lo contrario los lectores terminarán aburriéndose al leerlas. Debe orientarlos en el tema y hacer que quieran saber más y terminen de leer el póster.
Paso 5. Una vez que termines la introducción, lo siguiente es redactar la sección "Materiales y métodos". En esta parte, el creador puede incluir libremente algunas imágenes del procedimiento. Aquí es donde se mostrarán al público todos los materiales y métodos utilizados. También es eficaz explicar por qué el creador eligió esos materiales y métodos.
Paso 6. A continuación, tenemos la sección "Resultados". Indica o discute los hallazgos que obtenidos a través de los materiales y métodos utilizados. Puede tratarse de una visualización gráfica o de cualquier evidencia que pueda demostrar el resultado. La mayor parte del tiempo, esta sección es la más larga debido a las explicaciones y ayudas visuales adjuntas en ella.
Paso 7. La siguiente sección es la conclusión, en la que el creador del póster científico repasará brevemente el tema y explicará sus conclusiones.
Paso 8. Por último, escribe algunos agradecimientos y los recursos de la investigación realizada.
1. Conoce quiénes serán los destinatarios del póster para elegir las palabras y visualizaciones adecuadas.
2. El cartel debe ser conciso y, al mismo tiempo, estar lleno de la información valiosa que el autor elaboró.
3. Piensa en cómo hacer el cartel más atractivo e informativo. Utiliza la visualización gráfica para reducir el número de palabras que hay que emplear para echar un vistazo rápido.
4. Las fuentes de los textos deben ser legibles y no demasiado pequeñas.